Loja es una importante ciudad del Reino y posterior Región Histórica Granadina, un lugar que merece ser visitado por su patrimonio, gastronomía, paisajes...
IGLESIA DE SAN GABRIEL
Es una gran obra del siglo XVI, tercer Reino de Granada, Monumento Histórico Nacional desde 1991.
Gómez-Calero lo considera una de las obras más importantes de la arquitectura renacentista granadina por las novedades que presenta, iniciando la etapa más original y expresiva del clasicismo español.
Se trata de una obra trazada por Diego de Siloé (el creador de la Escuela Granadina), aunque también podría ser obra de su discípulo Juan de Maeda.
EXTERIOR
Lo que más atrae son los poderosos contrafuertes que le dan una originalidad que lo hacen único.
Torre
Su elevada torre remata en un cuerpo de campanas ochavado muy sólido y airoso.
Portadas
Dispone de dos ricas portadas, la más valiosa la Portada de la Encarnación, en el lateral, obra de 1566 con dos cuerpos y un hermoso tejaroz ricamente labrado
El primer cuerpo posee cuatro columnas jónicas sobre pedestales, que enmarcan un arco de medio punto en cuyas enjutas dos ángeles sostienen el escudo del Arzobispo Guerrero.
En el segundo cuerpo la hornacina central, situada entre cuatro columnas corintias, contiene el grupo escultórico de la Encarnación con el Arcángel San Gabriel, la Virgen María y el Padre Eterno, encima un frontón triangular alberga el escudo de España.
INTERIOR
Su planta consta de una amplia nave cubierta por armadura de tipología neomudéjar granadino, con capillas laterales, que remata en una capilla mayor con una bóveda baída en la que se inscriben anillos concéntricos con bustos en relieve de los apóstoles y otros personajes, todo centrado por Dios padre.
El templo de enriqueció con abundantes obras de arte, destruidas en los incendios intencionados de iglesias el 19 de julio d 1936. Sirva este recordatorio no para crear odio sino para saber que el odio termina con la convivencia, el arte y hasta la vida. Que nunca se repita el odio entre hermanos.
Se han conservado algunos frontales de altares que por ser de piedra no ardieron.
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