Está situado en la calle Zafra del Albaicín, en la que, tras una sencilla puerta, como ocurre con numerosos cármenes, se levanta una antigua casa con un jardín de proporciones medias; este tipo de construcciones granadinas está caracterizado precisamente por la presencia de este hermoso elemento que las conecta con la naturaleza. El jardín que nos ocupa es también huerto, en él podemos encontrar desde gran variedad plantas con flor hasta frutales como naranjos, granados... terminado con plantas aromáticas como el laurel. En cuanto al edificio, tradicional casa de vecinos asentada en un hermoso palacete del siglo XVI, hay que decir que posee, entre otros elementos interesantes, un cenador sostenido por columnas de origen romano y una escalera cubierta por armadura mudéjar ricamente decorada.
Una sencilla portada y tras ella el paraíso.
Apacible hogar de varias familias.
Cenador con columnas romanas.
Armadura mudéjar de la escalera.
Corredores del segundo piso, con bellos azulejos Alhambristas en la escalera.
En el jardín se encuentran restos arquitectónicos de otras épocas...
Flores y frutales.
Pero el edificio necesita una urgente y costosa restauración... Esperemos que los dueños y la administración consigan dar solución a este problema que amenaza el futuro del monumento.
El albaicin sirve de moneda de cambio para la especulacion
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